No es fácil responder a esta pregunta porque creo que no nos define una única cosa, pero si has llegado hasta aquí es porque seguramente me conozcas como actriz.
Cuando tenía 10 años, en una consulta del médico, la doctora me preguntó: "Y tú... ¿qué quieres ser de mayor?" Yo contesté -con total seguridad- ¡quiero ser actriz en Hollywood! Mis padres se echaron a reír y, como lo tenía tan claro, me apuntaron a clases de teatro.
Tuvieron que pasar muchos años para que el sueño de la niña se convirtiera en realidad. Me gradué en Periodismo y Empresariales por la Universidad de Valencia y después me fui a vivir a Londres. Fue allí, entre sus calles llenas de teatro, cuando me di cuenta de que lo que verdaderamente me apasionaba y me hacía sentir viva era estar sobre un escenario.
Decidí mudarme a Madrid y comencé mi formación en el Estudio Corazza para la Actuación. A los pocos meses de graduarme me sumergí en un proceso creativo que se convertiría en la obra de teatro SERNOSER, que habla sobre el deseo de ser (o no ser) madre.
Paralelamente continué mis estudios, esta vez con Lorena Bayonas, en su curso de Profesionales en el Centro del Actor. No dejo de entrenar porque como artista lo considero fundamental y por eso también he hecho seminarios específicos con maestros como Augusto Fernandes, Consuelo Trujillo, o Lautaro Perotti.
En los últimos años he seguido ampliando mi experiencia en teatro con obras como Señorita Julia y La Vida es Dulce, y también dando pasos en proyectos audiovisuales gracias a directores como Roberto Pérez Toledo y Sayago Ayuso en cuyo último trabajo, “Por tus muertos”, doy vida a uno de sus personajes.
Hoy resido en Madrid, hice caso a aquella niña y me dedico a lo que me apasiona. Sigo explorando cada día nuevos horizontes artísticos en teatro, cine y televisión.